El otro día, una mujer casada
me hizo algunas preguntas sobre cómo la D/s podría expresarse en el día a día,
dentro de su matrimonio, sin exponerse demasiado, sin transmitir, de una manera
ostensible, su condición de sumisa, debido al hecho de que tiene hijos
pequeños.
He aquí algunas de las
sugerencias que le dije:
Esperar a tener permiso de tu Dominante para empezar a comer.
Permitir que tu marido te preceda para entrar o incluso abrirle la
puerta.
Llevar una prenda de vestir simbólica o un accesorio, como una
pulsera de cuero en tu muñeca, tobillo o cuello. También podrías considerar el llevar
un pequeño plug.
No le llames por su nombre, sino más bien “marido” o “padre.”
Siempre camina a su derecha o izquierda, según le convenga.
Esperar a que Él se siente primero.
Siempre que sea posible (por ejemplo, en la sala de estar),
siéntese en el suelo cerca de su pie, mejor que en una silla.
Nunca discutas con él en presencia de los niños.
Y como nota de advertencia, mantén siempre el cajón de los juguetes
cerrado con llave. La última cosa que no necesitarías hacer es, intentar
explicar a los niños por qué papá le pone a mamá las esposas y la azota hasta
hacerla gritar.
Aunque estas normas no entran en mi condición de spankee, no he podido sentir un escalofrío de placer al leerlas.
ResponderEliminarDel spanking a la sumisión, no hay nada....
ResponderEliminarFeliz día...
Entre el spanking y la sumision no se puede medir la distancia, simplemente, porque están en universos diferentes. Para que se entienda, que no tienen absolutamnte nada que ver. Si que puede haber falsas spankees que en realidad no se reconocen como sumisas, y por ello les atraen estas cosas. Y yo, como spankee, me he encontrado mas de un amo que intenta convencer a las spankees de que se trata de lo mismo, supongo que para tener mas oportunidades .Anda, dile a una spankee autentica que se siente a tus pies, y vas a ver donde te manda.
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