Creo, con certeza, que si le preguntas a diez hombres cuál es su acto
sexual favorito, al menos, ocho de ellos dirán que le hagan una felación. Para
los hombres, es una experiencia perfecta, puro placer físico y sin esfuerzo
exigido.
En el mundo de la pornografía, la felación compite con el coito como
el acto visto más frecuentemente. Esto puede ser porque es una de las cosas más
fáciles de fotografiar. Las relaciones sexuales no exigen mucho truco, las
partes del cuerpo tienden a ponerse de una manera perfecta en la mira del objetivo.
Pero, cuando un hombre introduce su pene en la boca de una mujer, puede ver
exactamente lo que necesita y quiere ver: una mujer ardiente y una polla. Para el
porno, tiene una ventaja añadida, que es bastante fácil ganar dinero mostrando
el momento en que el hombre eyacula.
Si su pene está introducido en la vagina de la mujer, bueno, tiene que
sacarlo si se quiere ver su eyaculación, lo cual siempre me parece como un acto
nada natural. Si el pene está introducido en su boca, ella puede, por supuesto,
tragárselo y no perder ni una gota. Pero, por lo general, siempre hay
excedente, lo cual mejora el espectáculo.
Una pregunta interesante es, ¿en qué medida la felación,
inevitablemente, tiene algunos matices de la D/s? Alguna vez, ¿puede ser un
acto meramente vainilla? La mujer no tiene que estar de rodillas mientras hace
una felación, pero, lo más probable, es que ella tendrá que estar en una
posición inferior, mientras que el hombre estará sentado o de pie.
¿Significa esto que ella está en modo sumisa, sin importar cuán
vainilla la relación pueda ser? Sospecho que para muchos hombres, esto es una
parte del atractivo. Es muy fácil para los hombres vainillas conseguir la
experiencia de la D/s. Por supuesto, puede ser también lo opuesto. Las mujeres lo
hacen después de todo y, por lo general, les gustan chupar la verga y la buscan
activamente para hacerlo, presionando al hombre para que se ponga de espalda y
luego saciarse.
Sin embargo, incluso en el sexo vainilla, con frecuencia, parece ser
un elemento de dominación involucrado. Existe una escuela de pensamiento que
dice que, por mucho que se suprima, siempre hay alguien que besa y otra persona
que es besada.
Como en todas las artes sociales, en la cocina, por ejemplo, la
felación es una habilidad que puede desarrollarse a través de prácticas
interactivas (la prueba del bizcocho está en comerlo, la de chupar la
polla está en muchas otras cosas) y
también en la intuición.
Algunas mujeres tienen un talento tan natural e instintivo que parecen
saber casi siempre lo que le gusta a un hombre. Sospecho que, en parte es,
porque le prestan mucha atención a las señales que él les da, los suspiros
suaves y los gemidos de placer mientras hace esto o aquello. Los hombres varían
mucho en lo que les gustan. A algunos, les gustan despacio y sensual. A otros,
fuerte e, incluso, con brutalidad y, por lo tanto, una mujer que quiera darle
el máximo placer se ajustará de acuerdo con las respuesta que reciba de él.
Pero, pienso que cualquier hombre que quiera tener la mejor
experiencia para sí mismo, tiene que cooperar y proporcionar señales e,
incluso, decir sus preferencias. No puedes esperar que la mujer lo descubra
todo por sí misma.
He visto esos manuales que pretenden enseñar cómo llegar a ser la puta
más perfecta haciendo una felación y estoy seguro que esos libros están bien
intencionados y algunos pueden ser útiles para personas inexpertas.
Pero, el aprendizaje en el trabajo con un receptor sensible es mucho más
probable que enseñe más de lo que una mujer necesita conocer. Y si alguna vez,
tú, hombre, te preocupas porque no lo estás haciendo bien u, horror de
horrores, que tal vez tu ex mujer lo hiciera mejor, recuerda: para cada ocho de
diez hombres, no existe una mala mamada, sólo existen buenas y mejores.
Supongo que gran parte de lo expuesto anteriormente, mutatis mutandis,
se aplica al cunnilingus. Pero, este será un tema otro día.
no creo que nunca logre entender la obsesion de los obres por las mamadas y mucho menos por tragar semen es algo que se me escapa... y creo que no lo voya entender nunca! mas que nada porque no puedo experimentar que sentis, tampoko entiendo el gusto por el culilungus la verdad sera que no me lo han echo bien¿¿??
ResponderEliminarLeidy Princes
Copio y Pego...
ResponderEliminarAlgunas mujeres tienen un talento tan natural e instintivo que parecen saber casi siempre lo que le gusta a un hombre.
OPINION:
jajajaa...me río yo de esto.¿ Sólo Algunas mujeres tienen un "talento" natural q parecen saber casi siempre lo q le gusta a un hombre??????????....Mi niño perdona q te diga...NADIE nace enseñao. La práctica de lo q sea te hace un experto en TODO. Por eso las putas son especialistas en este tipo de cosas porque andan hora tras hora,día tras día, año tras año con mini-pollas, con normal-pollas, con maxi-pollas, con extra-pollas, con pollas de todos los tamaños y gustos, hasta las asquerosis-polla y vomitunas-polla(¡me encanta la palabra polla!)...a lo q íba, si quieres una BUENA MAMADA...¡a pagarla! y si la quieres gratis...¡a mamarla!.
Y una opinión personal más:cuando se mama con ganas y con AMOR...ni la gran experiencia, ni el dinero, ni la mejor de las bocas la mamaría mejor. Y te lo digo por experiencia.
¡hasta la vista baby!
Yaséloquesoy
gezolan@gmail.com
EliminarMe ha encantado el escrito señor Ben Alí, y también los comentarios, aunque difiero de algunas.
ResponderEliminarmamar una polla es como probar un vino, se tiene que disfrutar con la vista, el olfato, el gusto, el tacto y por supuesto el oído, no he probado tantas como podría suponerse, incluso menos que la cantidad de dedos en una mano.
No importa el tamaño, importa que te desvivas y te encante mamar la polla. que tu seas la que origina los gemidos en ese hombre que te da su polla a mamar...
Cindy