La comunidad de la D/s tiene un
concepto especial y real acerca de las palabras y etiquetas. He escrito sobre
esto anteriormente. Ciertamente, hay una falta de consenso sobre las palabras
“Maestro,” “esclava,” “Dominante,” “sumisa,” etc. Incluso, los conceptos
básicos como castigo, esclavitud, servicio, etc., están abiertos a una gran
cantidad de interpretaciones personales. Eso está bien. No tengo ningún
problema para usar la definición de otras personas en una conversación, siempre
y cuando sepamos lo que son.
Sin embargo, existen algunas
palabras que pueden ser usadas de muchas maneras, todas ellas correctas y no se
requiere definiciones reales. Un buen ejemplo es la expresión “por favor.” He
aquí un extracto de un correo electrónico de una seguidora anónima que me envió
hace cuatro días.
“Algunas veces es: “por
favor…folle a esta mujer.” Otra, “por favor…deje que esta mujer chupe su
polla.” Otra más, “deje que esta mujer se corra.” Algunas más serían, “por
favor… no pare,” “por favor…hágalo de nuevo.” “Por favor…que me duela más.” A
veces, es incluso “por favor…deje de hacerme daño.” Pero, la mayor parte de las
veces, se pronuncia de una manera totalmente reflexiva, sin una significación
específica, sólo porque sienta muy bien el decirlo. En otras palabras, el rogar
se ha convertido excitante por sí mismo y también es, al mismo tiempo, una
expresión de la emoción o excitación, de manera que la palabra mágica “por favor”
es, con mucho, la palabra perfecta gritada en medio del éxtasis sexual.”
Bonito, ¿verdad? Por supuesto, la
anónima estaba hablando de usar la palabra durante una sesión, pero, se puede
ver cómo podría ser usada en casi cualquier momento. Por ejemplo: “¿Por favor,
puedo servirle? o “¿puedo, por favor, tener su permiso para ir al baño?” etc.
Muchas expresiones de muchas maneras.
Para aquellos de ustedes que
están ya en una relación D/s, ¿por qué no intentan tener una noche entera donde
sólo se le permita a vuestra sumisa usar esta palabra para comunicarse? De esta
manera, el tono, la inflexión, el volumen, etc., serían muy importante para
entender lo que se le pida. Esto centraría la atención de la sumisa, al igual
que la del dominante. Creo que los resultados serían interesantes.
O, como la mujer que escribió
el email, ¿qué tal una sesión en la que “por favor” sea la única palabra
permitida?
Humm…claro, eso podría ser también muy interesante.
Muy acertada su reflexión sobre esta expresión. Nunca había pensado en ello, pero yo la utilizo constantemente en mi relación, disfruto cuando lo hago y me siento muy erótica al hacerlo.
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