Por
lo tanto, ¿cuándo empieza?
A la vista de ello, se diría que
cuando el Dominante decide tomar el control y la sumisa decide consentirlo y,
hablando honestamente, yo tendería a estar de acuerdo con esta sencilla
explicación.
Pero, ¿cuándo empieza la
relación?
Si miramos a la última frase,
podemos ver dos pistas. La decisión de asumir el control y el consenso. Para
ambas partes, este proceso es válido para los dos y sigue una línea
fundamental, sentirse seguros. Como persona dominante, - con independencia de
la “escabroso”, pero, por el bien de este artículo, hablaré solo en un sentido
atrevido. Sé que tengo una responsabilidad moral de proteger de cualquier daño a las personas con naturaleza
sumisa. Y las sumisas que tienen que ser muy conscientes de las posibles
situaciones de riesgo en que pudieran encontrarse. Especialmente, si ellas
fueran demasiado lejos. Esto es algo muy importante que está en la mente de
todos.
En el mundo vainilla, esta idea
individual de la responsabilidad moral por la seguridad se mantiene por sus
propios códigos de conducta ética. En el mundo “perverso” que nos ocupa,
incluso cuando se entra en una sesión, pero sobre todo, al entrar en una
relación D/s, esta idea de la responsabilidad por su seguridad, nunca se deja
del todo cuando se transmite a la persona que autoriza la toma de su control, el
aspecto de la confianza.
La decisión de autorizar
En lo que respecta a las sumisas
y al tópico de este escrito, esta decisión de autorizar procede de estar bien
informado, a través de compartir, de qué esperar, como se verán todos los
riesgos previsibles, los beneficios a la persona por participar en esto, cómo
resolver los problemas dentro de la relación y muchas cosas más. Por esto, es
por qué el acto de sumisión se conoce “como consenso informado.”
La decisión de tomar el control
Para aquellos de ustedes que han
leído asiduamente mis escritos, sabrán que la confianza para mí, está en
compartir.
Una breve visión de fondo: He
leído mucho sobre la conducta del consumidor, que abarca temas como la
antropología social, la psicología y la sociología y la conducta cognitiva.
Esto ha influenciado mucho en mi forma de pensar sobre el control.
El control es un rol activo o
responsabilidad hacia los demás o sobre la conducta de otra persona. Toda
conducta es un intento de satisfacer las necesidades de gran alcance que están
dentro de nosotros y se compone de tres elementos claves. Lo que hacemos, lo
que pensamos y lo que sentimos. Y en un momento dado, toda nuestra conducta es
un intento para satisfacer estas necesidades dentro de nosotros. Estas
necesidades incluyen:
La necesidad de sobrevivir y
reproducirse.
La necesidad de pertenecer (amor,
compartir y cooperar).
La necesidad de poder.
La necesidad de libertad.
La necesidad de divertirse.
Si bien esta lista no es
exhaustiva, son las necesidades que usted encontrará en cada uno. Sin embargo,
el control o falta del mismo no es una necesidad. Es la manera de cómo debemos
funcionar con el fin de satisfacer nuestras necesidades.
La necesidad de pertenecer - por
ejemplo, estar en una relación - es cuánto estamos dispuestos a aceptar el
control o la falta del mismo. Nuestras vidas son una lucha continua para
obtener el control de nosotros mismos para ser capaces de satisfacer estas
necesidades, aunque sin privar a quienes nos rodean de satisfacer las suyas.
Cuando satisfacemos una
necesidad, incluso desde una edad temprana, almacenamos una imagen mental de
nosotros mismos y cuando queremos satisfacer esa necesidad una vez más, usamos
esa imagen como base para lograrlo. Lo que es importante tener en cuenta aquí,
es que no hay dos personas que compartan exactamente la misma imagen-ejemplo de
la necesidad de estar sometida a un dominante.
O más concretamente, la necesidad
de estar controlada o tener el control ejercido sobre un aspecto de su vida que
usted quiere cambiar. La realidad es que muchas de esas imágenes – necesidades
– son difíciles de cambiar, pero pueden ser cambiadas. Sin embargo, forzar
esto, incluso en el nombre de ser dominante o sumisa es, por lo general,
contraproducente.
La única manera de lograr un
cambio en estas necesidades es encontrar primero algunas fotos – necesidades
–que compartes con los demás y así construir la confianza, el respeto, etc., y
luego, implementar un cambio consensuado informado.
En otras palabras, la decisión de
un dominante de tomar el control también trata de sentirse seguro.
Por lo tanto, ¿cuándo se inicia
la dominación y la sumisión?
Cuando los dos nos sintamos
seguros.
Y llegar a este punto, no tiene
nada que ver con lo pervertido o el mundo vainilla, pero tiene que ver todo con
el escuchar a los demás como iguales.
Buenas noches
ResponderEliminarComo siempre una gran entrada Sr Ben Ali
A mi parecer los dos inician de igual manera, como usted dice todos somos iguales, tenemos diferentes roles que cada uno los siente, pero iguales a fin y al cabo, pero para dominar o para obedecer debe existir la confianza y para poder confiar tanto dominante como sumisa deben conocerse bien, saber que el uno dará al otro lo que desea, y eso se logra solo conociéndose cada día, cada día se construye algo se conoce a las personas y solo así se sabrá que El le dominará y que ella vera solo por sus ojos,
Cuando en los dos exista el deseo de dominar y ser dominado no harán falta las palabras ella verá en sus ojos lo que El desea y ella solo querrá complacerle, pero todo depende de como construyen todo.
mia
No se puede seguir adelante sin seguridad ni confianza en el otro, eso te limita por completo, te bloquea, te impide descubrir hasta donde se puede llegar y por supuesto te imposibilita gozar plenamente como sumisa o como Dominante
ResponderEliminar