Eres peculiar,
contundente y cándida. Algunas veces, tus días son demasiado oscuros y tus
noches, a veces, son demasiado largas. A menudo, viajas sobre tus propias
inseguridades. Requieres atención, tiempo de pasión y deseo de ser deseada. Usas
la música para hablar cuando las palabras te fallan, a pesar de, que las palabras son tan
importantes para tí como el aire que respiras. Te encanta que lo haga dureza y
con todo lo que tienes e, incluso, con tus propios defectos. Eres digna de ser
amada.
Dichosa la destinataria de este escrito :) :)
ResponderEliminarEnhorabuena
rarita
Esas palabras van dedicas a tantas y tantas sumisas anónimas que viven en silencio su sumisión y que, por los motivos que sean, no pueden realizarse como tales..
ResponderEliminarLas palabras pueden llegar a enomorar.
ResponderEliminarGracias por la respuesta.
:)
rarita
Pienso que sí y pienso que no...¿Te suelen enamorar las palabras escritas?
ResponderEliminarA veces... :)
ResponderEliminarrarita
Cuando la nostalgia visita mi alma, leo este poema en voz alta y hasta los objetos que me acompañan, "cobran vida" !Ahi! Se que la magia empezo.
ResponderEliminarAtt
Zoraya
Me alegro, Zoraya...
EliminarDichosa tú que empiezas a vivir la "magia."
Saludos