“Quítate las bragas.”
Ella levanta su falda y las desliza sobre sus tobillos. Sin importar
cuántas veces lo ha hecho, es todavía muy tímida.
“Ven y crúzate sobre mis piernas,” dice él. “Boca arriba.”
No está segura si le gusta su tono de voz, pero, de todos modos, lo
hace.
“Abre tus piernas todo lo más que puedas.”
Ella lo hace, pero tiene que mirar hacia otro lado. La examina detalladamente.
“Tienes un buen coño,” dice él.
No está segura de cómo se siente sobre sí misma, pero se alegra de que
le guste.
“Aunque un poco rebelde.”
¿Codiciosa? Ella lo admitiría. Pero, ¿rebelde?
“Últimamente, has tardado demasiado tiempo en correrte,” dice él.
Ahora, la está acariciando.
“Sí,” dice ella. “Es verdad. ¿Eso es malo?”
“Te lo he permitido,” le dice a ella. “Pero, tal vez, he sido
demasiado indulgente contigo.”
“Señor, es usted quien tiene que decir al respecto,” responde ella
obedientemente.
“Necesitas disciplina,” dice él.
“¿Usted cree?” Ella responde. Comenzó como una simple pregunta, pero
no estaba segura de que no fuera un toque de provocación. De pronto, la azota
de lleno con la palma de la mano contra su vagina. Ella chilla, tanto de
sorpresa como por cualquier otra cosa. Instintivamente, cruza sus piernas y
pone su mano sobre ellas.
“Abre las piernas,” la ordena él con autoridad. “Y no te atrevas a
poner tu mano ahí abajo otra vez.”
Él abofetea su sexo otra vez. No está usando toda su fuerza, pero
pica. Él golpea una y otra vez. Su coño empieza a sentir un hormigueo. Sigue
azotando un poco más. Empieza a palpitar. Entonces, se levanta, dejándola
echada sobre el sofá. Va hacia un cajón, vuelve con un látigo de varias colas.
Tiene unas tiras muy finas de goma, tirando a color rosa. Cuando se aplica con
mucha fuerza, puede producir un golpe doloroso. Pero, es capaz de producir
caricias más suaves y muchas gradaciones entre las mismas.
Él se pone de pie junto a ella. “Abre tus piernas otra vez,” dice.
Ella mira al látigo. “Por favor, Señor.” dice. “Por favor, no más.”
“Estoy esperando,” dice él.
Sabe que es mejor aguantar cuando él habla de esa manera. Despacio,
ella abre sus piernas otra vez. Pasea los flecos del flogger por el vientre de
ella, sobre los labios vaginales, de un color rosa oscuro debido al spanking
sufrido. Ella se estremece. Él levanta el látigo y lo lleva hacia abajo
descargándolo con toda su fuerza sobre su coño. A ella se le corta la
respiración. La necesidad de cerrar sus piernas para protegerse a sí misma es
casi irresistible; ella se esfuerza por mantenerlas abiertas. El látigo
aterriza otra vez. Luego, otra vez. Pica. Ella se mete un dedo en su boca, se
muerde a sí misma para no gritar.
Por fin, deja el látigo contra la pared. Ahora, el dolor ha parado, su
coño está zumbando. ¿La follará él?
“Hoy, no te vas a correr,” dice él, poniendo el látigo aparte. “Y no
estás autorizada a tocarte.”
Eso es una crueldad real. Ella quiere y desea enormemente tocarse el
coño, cogerlo con su mano y calmarlo suavemente.
“Y deja tu ropa interior fuera,” dice él. “Porque puede ser que necesite
disciplinarte de nuevo.”
Salvaje y sensual!! Un placer imaginar esa escena.
ResponderEliminarSaludos
Pues sí, isabella. Tal vez, una disciplina cruel, pero eficaz.
EliminarBuen día,
Ben Alí
Salvaje y sensual!! Un placer imaginar esa escena.
ResponderEliminarSaludos
Si se ha asumido un rol, se debe llevar a cabo Ben Ali, o lo haces o lo haces, no hay otra opción, aunque siendo algo irreverente te diré que también en el pedir está el otorgar, tanto tiene un rol uno como lo tiene la otra, o es que a mi me gusta la voz firme si, pero suave, acariciadora, la mirada dominante pero profunda y una mano levantando una fusta puede ser la más dulce caricia después de haberme perdido en su mirada.
ResponderEliminarUn saludo Ben Ali
Certero comentario el tuyo. La disciplina es como tú la comentas o la ejecutas o la ejecutas. No hay otra alternativa. De lo contrario, el dominante se desautorizaría a sí mismo.
ResponderEliminarFeliz día, Ame.
Ben Alí
No puedo describir con palabras, lo que me ha hecho sentir esa primera frase, con la que empieza su texto! Imagínese con el resto!!
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