martes, 9 de agosto de 2011

Cómo disfrutar de tu sumisa (de manera que ella disfrute) Parte II

Hielo
Ya que me gusta tanto esta imagen, continuaré un poco hacia delante. La próxima vez que ella gima, dígale que le llevará unos cubitos de hielo y luego vuelva a su posición. Si su culo está suficientemente caliente en ese momento, frótele ligeramente un cubito de hielo sobre sus nalgas enrojecidas. Para muchas mujeres, esta es una sensación exquisita.
Sólo una pasada rápida… esto es un buen ejemplo de algo que ella puede querer experimentar pero no lo puede pedir. Aquí es dónde tu fuerza, iniciativa y creatividad como Dominante entrará en juego. No tenga miedo de experimentar dándole nuevas sensaciones.
A medida que el hielo se vuelve más suave, frótalo sobre sus labios interiores y su sexo. Puedes elegir insertarlo en el interior de su vagina o si es muy pequeño y suave, introdúcelo en ella apretando un poco su culo.
Pedir permiso
Otra manera que puedes recordarle constantemente a ella, es que está bajo tu control teniendo que pedir tu permiso. Contra más restringida esté su independencia, más aumentará su sumisión.
Un ejemplo que pone de relieve esto, además de servir para avergonzarla sutilmente es hacer que pida permiso para ir al baño. Esta cuestión alude a la idea de la pérdida de su privacidad personal, la cual puede incrementar el vínculo íntimo entre los dos. Si ella se sonroja, es una buena señal.
Si sales con ella a un restaurante, aleja su menú y decide por ti mismo su comida. Esto no solamente incrementará su sumisión a ti, sino que también la libera de tener que tomar una decisión por ella misma.
Otra experiencia muy romántica e incluso más embarazosa para ella sería no pedirle nada a ella y luego alimentarla de tu propio plato. De vez en cuando, poner un sabroso bocado en su tenedor y hacer que se incline para cogerlo de tu mano. Creo que esto es una manera muy dulce para que ella se sienta cerca y dependiente de usted.
Es muy común no permitir a una sumisa que se corra sin haberle dado permiso. A ella solo se le permite el placer bajo su mando, que hará hincapié en tu control sobre ella. Esto aumentará la anticipación de su permiso para poder mantenerla al filo del orgasmo durante un período de tiempo que se basará en su intensidad.
No solamente ella no puede tener un orgasmo sin tu permiso, sino que ni incluso se le puede permitir tocarse sin permiso. Al establecer esta regla para ella, estás haciendo que admita su deseo de tocarse a sí misma pidiendo tu permiso, que es también una manera para ti de conocer lo excitada que se ha llegado a poner bajo tus órdenes.
Usted puede querer probarla justo en el borde de un orgasmo y luego ordenarle que se corra para usted mediante una orden verbal. Es posible que esto tenga un efecto notable. Algunas mujeres tienen la habilidad de estar entrenadas para orgasmar bajo una orden y hay varias técnicas que pueden ser usadas para lograr esto aunque no voy a entrar en ello en este artículo.
Tirando de su pelo
Un truco muy “caliente” para muchas sumisas es que las tiren de los pelos. No de una manera dolorosa, sino como una experiencia muy sensual. Para muchas mujeres, esto puede ser extremadamente una poderosa excitación y puede ser sorprendente por su reacción. Llamarla para que se acerque a usted y acariciar su pelo durante un momento antes de cogerlo con tus manos  y hacer firmemente que ella te mire a la cara para un beso apasionado – ella se fundirá en un charco en el suelo.
Tratándola como una mascota
A muchas mujeres sumisas, les gustan ser tratadas como una mascota. Todos sabemos el mucho amor y atención que reciben nuestras mascotas y ello debería ser emocionante embarazoso y dulce – para nada degradante. Las mascotas son sujetas también por un collar y una cadena, ¿no?
Pruebe esto juntos en una noche especial. Pídale que se desnude y se arrodille ante ti. Dile que ella va a ser tu mascota durante la noche y amorosamente colócale el collar y engánchalo a una cadena. Dile que ella va a ser tu dulce gatita y no le será permitida hablar a menos que le des permiso. A su vez, ella debe maullar y ronronearte.
Una idea muy erótica es  hacer que te maúlle y ronronee mientras la acaricias. Tal vez, si tu querida mascota está en celo, haz que se frote su coño contra tu pierna como si pidiera que le prestara más atención. Asegúrate de llevarla al orgasmo mientras le permites que maúlle de placer…
Es un sentimiento increíble tener a la mujer que amas y que te ama durmiendo a tus pies mientras tienes su cadena en tu mano. Haz un pequeño nido con tu almohada y las mantas en un rincón y haciéndole a ella un sitio especial. Como una mascota, se le permitirá estar de pie y usar los muebles. Tal vez, podrías poner un cuenco con un poco de leche para cuando vuelva…
Un tema como este da mucho de sí en el juego de roles que pueden ser un escape maravilloso del estrés de vuestras vidas. Es un momento único, donde puedes olvidar ser un adulto y volver a los inocentes y creativos juegos de los niños y de las niñas.
Juego anal
Para algunas mujeres, el juego anal es lo último en sumisión y placer. Debido a la privacidad y la intimidad de la zona, es muy difícil para ella pedirte que la toques ahí. Este es otro momento, cuando tu autoridad, como Dominante, hace lo que quieras sin importar cuán vergonzante pueda ser, porque es esencial para ella. Háblale sobre sus sentimientos en esta materia. Si ella admite su deseo de que la estimules analmente, sospecha que puedes disfrutar jugando con ella ahí mucho más de lo que ella pueda ser capaz de admitir. Como siempre, esto es algo sobre lo que deberías tener muchas conversaciones. Hay muchas mujeres que odian absolutamente cualquier tipo de juego anal.
No solamente es deslizar un dedo bien lubricado en su parte inferior más erótica, es también un tremendo recordatorio de que ella ha perdido su privacidad contigo y crea un fuerte recuerdo de su sumisión ante ti. Para llamar con esto su atención, me gusta hacer que la sumisa juegue una parte activa en esta entrega íntima teniendo comprimido mi dedo en el interior de su ano.
El juego anal, la mayoría de las veces, incluye el uso de un plug anal que es una maravillosa manera de mantenerla en su papel de sumisa mientras va por la casa haciendo las tareas o incluso en público. Tenga en cuenta que, para ella, llevar un plug en su culo no es un castigo, sino un maravilloso premio.

8 comentarios:

  1. Buenas noches Señor:
    Le devuelvo la visita, me ha gustado mucho su blog, interesante y educativo.
    Volveré más a menudo y gracias por comunicarse conmigo.
    Saludos
    carmesí

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  2. Buenas noches
    Un placer leer tan interesantes textos, un saludo respetuoso.
    vahiné{DeJ}

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  3. Gracias, por tus visitas y comentarios...feliz tarde

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  4. Bienvenida, carmesí...confío que la dinámica de mi blog sea de tu agrado y te aporte luz en tu caminar como sumisa...

    saludos
    Ben Alí

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  5. Excelente entrada, Señor. Felicidades

    lilith {T}

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  6. lilith{T}, es interesante ver a una kajira por aquí...feliz día

    Ben Alí

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  7. Tengo una sumisa que aprendio por sus cuenta yo no quise seguir su juego al principio y lo hizo sola por internet, estamos casados y ella leyo 50 sombras de greiff y como que descubrio alli lo que ella era o le gustaba quiso llevarme a ser su amo pero fallamos por que yo cai en una lluvia de celos que casi nos cuesta el amtrimonio quiro saber como la llevo nuevamente a esta y si ese deseo intenso la pudo llevar a cumplir sus deseos con otros o los amos son unicos o cualquiera puede ser amo o que hago para que me diga si me quiere por que ella dice que me ama y que se siente mi sumisa por mi por que cuando fuimos novios yo la lleva a hacer cosas que se parece a una sumisa ella pasaba a mis pies y dependía totalmente de mi pero la relación cayo en rutina y me trato de brindar algo nuevo en el sexo.

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  8. Buenas tardes Bettin:

    Se es Amo o no se es. Estas inquietudes las llevamos en los genes. Tú no puedes ser ni actuar de una manera diferente a lo que eres y sientes. Lo mismo pasa con la forma de ser y sentir de la sumisa.

    Es posible o no que ella haya llegado a serte infiel porque no ha podido controlar sus impulsos de ser sumisa y ser sometida. En estos casos, los problemas se resuelven con el diálogo y la sinceridad entre vosotros.

    Para recuperar vuestra relación, puedes proponerla que has decidido dar un cambio en tu vida respecto a ella y que le vas a complacer intentando ser más dominante.

    Es posible que puedas conseguir avances. Todo depende de tu voluntad, la comprensión de ella y vuestra disposición para avanzar.

    Suerte.

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