jueves, 10 de marzo de 2011

Trío

“El problema  de un trío es que dos pueden conspirar contra un tercero.” John Updike. 
Mientras la miraba cómo le chupaba su pene, sentí una mezcla de emociones, algunas positivas, otras más perturbadoras. Pero intenté estar receptivo y ser honesto conmigo mismo. Si usted no puede serlo, usted no debería hacer estas cosas.
Creo que puedo sobrellevar bastante bien los desencadenantes lógicos de los celos. Como, por ejemplo, ¿es su polla más grande que la mía? Si es así, ¿ella la prefiere de esta manera? ¿Le gusta chuparla mucho? Por mí mismo, puedo distanciarme de estas ansiedades. Después de todo, quiero que ella lo disfrute. Si usted quiere a alguien, usted quiere que ella disfrute del placer, quiere darle las cosas que a ella le gustan. Nunca quise que ella hiciera esto por mí. En cierta manera, sentía que yo podía realmente experimentar su placer. ¿Es extraño que un hombre diga, imaginándose a sí mismo como ella, haciendo lo que ella está haciendo? No veo el por qué. Los novelistas siempre hacen esto, se ponen a sí mismo en los zapatos de otros. Y a mi me gusta ver. Tengo curiosidad por ver a la gente hacer cosas que normalmente no se ven.
(Es innecesario decir, que existe un mundo diferente entre ver a alguien practicando, de verdad, una relación sexual y verlo en una película. Si usted no me cree, inténtelo.) Además, me siento atraído por cosas que son tabúes, hacer cosas que se suponen que son “perversas” o “libertinas.” Y una cosa más que yo estaba pensando mientras lo veía. Yo disfrutaba con su exhibición, con el hecho de que él la quería muchísimo. Supongo que es una especie de jactancia. Esta primera vez, sentía que todo esto me demostraba que yo era su dueño, como realmente lo soy, que podía darla a otro hombre, que podía decirle a él lo que podía y no podía hacer con ella. Todo esto era una prueba o demostración de que yo era su dueño, que ella era una propiedad mía.
Al intentar profundizar un poco más, yo diría un par de cosas más. En cierto modo, compartir con él la intimidad que tengo con ella, invitándole, por decirlo así; de alguna manera, intensificaba lo que tengo con ella. Sin duda, mucha gente se sorprenderá de esta declaración. Asumirán que usted no destruye la intimidad al exponerla a otro hombre. Pero, yo no lo sentía de esa manera. Y, sin embargo, no estoy seguro de esto sea paradójico, pues al ver lo que ella está haciendo, hace que me sienta distanciado. Cuando la follo, estoy tan cerca de ella que, literal y emocionalmente, apenas puedo verla. Ella y yo nos fundimos en uno. Cuando la veo con otro hombre, tengo una visión más objetiva. La veo como otra persona, no sólo como una parte de mí. Ella tiene una existencia sexual independiente. En cierta forma, esto es bueno. Significa que, ciertamente, no lo doy por asentado.
Pero, aquí es donde empieza a llegar lo negativo, aquí está el peligro. Los celos pueden empezar a despuntar. Podría ser que ella consigue demasiada independencia. Después de todo, ella no me necesita para hacer lo que está haciendo. Tal vez, ella preferiría que yo no estuviese aquí. Quizás, la estoy exhibiendo. Quizás, existan cosas que a ella le gustaría hacer con él y que no está dispuesta a hacerlas ante mi presencia. ¿Me atrevería a tener la oportunidad de averiguarlo, dejándola sola con él, si esto es lo que ella quiere? Esto es una caída emocional muy difícil.
Cuando esto termine, al final de la tarde, ¿qué es lo querrá más, la reafirmación de mi consentimiento y que siento de la misma manera que yo sentía antes por ella? O, ¿le echará de menos, deseando que él vuelva? ¿Podría yo seguir sintiendo lo mismo por ella y esta no sentir lo mismo por mí? Tener relaciones sexuales es una cosa muy importante y muy poderosa. No puedes distanciarte fácilmente por ti mismo. No puedes favorecer el desarrollo de algunos sentimientos para la persona que estás follando, ¿verdad? Esto no puedo carecer totalmente de sentido para ella, de lo contrario, ¿qué sentido tiene? Y puedo sentir, al verla, lo mucho que está siendo afectada por todo esto. Pero, ¿puede ella controlar esos sentimientos, una vez que los haya tenido?
Claramente, si usted no puede hacer frente a este problema, no deberá hacer estas cosas. Si no puedes soportar el calor, la sal de la cocina, como dijo Truman. Creo que le hice frente dando mi conformidad. Esto te da una visión interior de ti mismo. Creo que todavía no he llegado al fondo. Sin lugar a duda, es un gran riesgo.

2 comentarios:

  1. Es un tema sumamente delicado. Pienso que hay que tener un equilibrio emocional y mental tremendo para que los celos no amenacen la relación, sin duda, daría para mucha conversación.

    Mis saludos.

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  2. Por eso mismo, lo he publicado, porque es un tema para una profunda confrontación de una relación D/s y así poder calibrar la solidez de la misma y enriquecerla.

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