martes, 22 de agosto de 2017

Sí, soy Dominante

Sí, soy Dominante, pero ¿qué signfica eso?  

He estado jugando con la perversión, ligeramente fuera de moda, durante muchos años y, a su vez, explorando los aspectos mentales de ser dominante durante esos años. He visitado Webs, he leído literatura al respecto y he sido curioso de otros foros similares durante algún tiempo y he aprendido mucho acerca de mí, y reconozco que sigo aprendiendo. Por lo tanto, siempre es divertido, cuando alguien busca orientación en mí, porque realmente, he llegado por mí mismo a este estilo de vida.

Pero, lo que todavía estoy averiguando, es qué tipo de dominante soy. Porque sé que no encajo en ningún arquetipo de dominante.

No soy un dominante del cuero. En cierto modo, disfruto el protocolo, pero eso no es lo que define a mi dominación, ni siquiera se aproxima. Mantengo un protocolo fluido y suelto que, para algunas sumisas sería como un apagón y puede que no satisfaga a sus necesidades de una dinámica D/s ultra estructurada.

No soy un dominante Papá (Daddy). Sí, tengo tendencias de un dominante papá, pero ese carácter distintivo de Dominante papá/babygirl no se comunica con mi estilo de intercambio de poder. Para nada, puedo comprender por qué una sumisa babygirl experimentada sería atraída por mí, dado mi rango emocional y naturaleza sensible. Aunque creo que, en última instancia, se sentiría decepcionada por la forma en que lidero lo que respecta a mi estilo de D/s.

No soy un sádico duro. Si necesitas ver tu propia sangre, eso no va conmigo. Definitivamente, tampoco soy un sádico bastardo, pero soy un sádico sensual que disfruta llevando, a veces, a la sumisa a las lágrimas, pero mi naturaleza sensual es siempre evidente y está presente, incluso durante un brutal azote. Ahora, si estás buscando ser colgada del techo y azotada hasta que estés cubierta de marcas y moratones, ten por cierto, que también tengo esas habilidades y el deseo de vivir ese tipo de experiencia

Soy dominante, sé que es verdad. Pero no siempre estoy dominando ni obsesivamente controlando y, hay veces, donde sólo quiero ser amable y ni siquiera participar en ningún tipo de intercambio de poder con mi sumisa. (Una buena comida y un helado de postre son, algunas veces, tan sabrosos como un buen azote).

Por lo tanto, sé que no soy el tipo correcto de dominante para un montón de sumisas que hay por ahí, pues, aunque, todavía estoy tratando de averiguar el tipo de dominante que soy, reconozco que soy un dominante diferente.

1 comentario: