Esas tres palabras,
“Tú eres mía,” pueden evocar algunas emociones serias en un dominante y una
sumisa. Naturalmente, cada uno reaccionará de una manera diferente al oírlas o
decirlas, pero la raíz de lo que están sintiendo, será un reflejo de lo demás.
En su epicentro, se trata de pertenecer.
Pertenecer a alguien
y tener a alguien que te pertenezca, crea una dinámica en la cual ambos se pertenecen
el uno al otro. Nace la necesidad.
Por su propia
naturaleza, una relación D/s crea propósito, significado, estructura y un
sentido de pertenencia. Porque, como puedo atestiguar, un dominante sin sumisa
o viceversa, es una realización propia incumplida. Ni siquiera puedes poseer tu
propia totalidad sin ser dueño de alguien, que te permita ser completamente
libre de expresarte en todas las facetas.
Es más que tener a
alguien para que te ordene arrodillarte o cualquier gratificación sexual que
puedas recibir. Se trata sobre el significado, incluso, si no eres la pareja
más cercana en el planeta. Para que puedas dominar o servir, cualquiera que sea
el papel que pueda ser, literalmente, necesitas a alguien para contrarrestar y
cumplir en el otro lado de la barra.
“Tu eres mía.” Esas
palabras significan que estás en casa, simbolizan un valor que es únicamente
tuyo. Porque, puedes emparejar a dominantes y sumisas durante el día y crear un
número infinito de relaciones matizadas. Habrá muchas similitudes, pero ninguna
de las dos personas se felicitará o servirá de la misma manera. Habrá
diferencias, algunas mayores, otras menores.
Así que, cuando
haces el trabajo de construir las bases y la pasión y el objetivo está allí y
las líneas de la perversión en alto, entonces, la habitación estará llena con
dos llamas ardientes que se funden en una hermosa relación D/s. Eso será, cuando
usted pueda vivir en esas tres preciosas palabras que dicen todo lo que podrías
pedir en una relación íntima, la confianza, el deseo, la comprensión y
significar algo especial para alguien especial.
“Tú eres mía.” Hay
un mundo entero en esas palabras y si, alguna vez tienes el privilegio de hacer
que esas palabras salgan de tus labios, una vez más, sumergidas en la verdad y
la convicción, entonces, espera ser siempre para ella.
Como sumisa,no hay palabras más hermosas que mi Amo pueda decirme.
ResponderEliminarTus cometnarios siempre son vibrantes.
EliminarFeliz tarde