Creo que, la cosa que
inicialmente atrae a la gente al intercambio de poder, es que está definida.
Claro, no hay manera de hacer las cosas, pero somos criaturas sistémicas y es
fácil averiguar los principios básicos de cómo funciona todo esto.
Existe un dominante y una
sumisa. Ahora bien, lo que eso significa va a variar mucho, pero no importa qué
tipo de dinámica estemos hablando (parejas de juego, dominante/esclava,
dominante/sumisa, sádico/masoquista o Daddy/niña mala) que estemos hablando de
un intercambio de poder de diferentes grados. Pero el elemento subyacente es,
las partes que se unen, se involucran e invierten en su construcción. Ese es el
atractivo, es la intimidad instantánea, es estar involucrado con algo, con
alguien que realmente tiene que ser cognitivo en la creación.
Ahora bien, cuando estás
involucrado con alguien y no están bien definidos los roles exactos que le
corresponden a cada uno, entonces, se convierte muy incómodo compartir momentos
de intimidad en un instante y ser amigos y, tal vez, incluso conocidos el uno
con el otro. Ese es el enigma de ser pareja de alguien sólo para una sesión.
Usted entra en un intercambio de poder muy limitado, negociado, momentáneo y
luego, ambos regresáis a ser amigos ocasionales. Es muy poco natural.
Ello puede servir a un
propósito, especialmente, si usted está deseando mantener su soberanía
personal. Pero, bajo mi humilde opinión, esos tipos de intercambio solamente
pueden ser tan potentes, que no van a ser capaces de desbloquear todo el
espectro completo de la increíble gama emocional y sexual que se puede lograr
en una relación comprometida de intercambio de poder. El problema radica en el poder
de encontrar a alguien que entre en ese tipo de relación que usted está
buscando. En la cual, usted será un buen complemento para el otro y ambos
apasionados el uno con respecto al otro. No es fácil construir un intercambio
de poder y, definitivamente, no es fácil encontrar a alguien que se ajuste bien
con lo que usted está buscando.
Es fácil follar. Es fácil azotar
o decirle a alguien lo que tiene que hacer o escuchar a alguien que te manda,
lo dificil es hacer que esos actos sean significativos y especiales. Me encanta
estar involucrado con una mujer, incluso, si es por un breve período de tiempo,
porque trato de crear momentos de belleza. No siempre he tenido éxito. No todas
las sesiones que he tenido han sido mágicas, pero es siempre la meta. Enseñar a
la persona con la que voy a estar y tratar de crear algo que sea claramente
nuestro y algo que queramos llevar siempre con nosotros.
Por eso hago lo que hago. Estar
en el momento, estar conectado y estar involucrado. Todavía sigo evolucionando
y no sé dónde podría terminar. Pero, dónde quiera que yo esté y con conquiera
que esté, quiero estar completamente invertido y totalmente involucrado en
crear algo que ambos queramos llamar nuestro, de nosotros dos.
Esa es la esencia de un
intercambio de poder en cualquier forma
que sea. No sólo pasar por los movimientos y jugar de una manera repetitiva,
una fórmula de comunicación sexual y erótica, sino, más bien, ponerse en
contacto el uno con el otro, hacer algo más, algo diseñado exclusivamente
por vosotros dos.
¡Diviérte haciendo algo bueno
juntos!
Toda la razón.. Si ambas partes no se involucran se pierde toda la magia que se pudiera haber creado, si no hay una carga emocional no tiene tanto sentido la relación de poder, si no existe eso por una de las dos partes o ambas, al final sólo son como juguetes que se utilizan el uno al otro... A.
ResponderEliminarQue bonito!
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