viernes, 24 de febrero de 2017

Nunca voy a ser tan bueno como él

No importa lo que yo haga, pues nunca estaré a su altura. Cuesta trabajo saber lo mucho que sientes por él. Cómo sus palabras caen sobre tí y te mantienes caliente en tus noches más frías. Cómo te pierdes en el pensamiento de lo que tú y él podríais estar haciendo, lo mucho que te excita pensar que él te está azotando, follándote, usándote de tal manera, que te sientes exonerada de su propio cuerpo, que estás a la deriva en ese espacio que existe de manera uniforme entre el placer y el dolor y tú, sufriendo ambas cosas al pensar en él.

Sus palabras no te pueden dar tanto y no llegas a comprender cómo caen sobre tí, como una ola de emociones que rápidamente te succionan hacia su trasfondo interior. Sabes, que si las cosas fueran diferentes, que sería jodidamente delicioso consumirlas en la carne y someterte a cada necesidad sádica que se elaborara en el interior de su bajovientre. Llevarías su marca con la misma sonrisa que si él hubiera conseguido rosas en su lugar. Pero si te gustan los pensamientos espinososos de su seducción, que has estado cartografiando durante meses, sabes que es perfecto, y te gustaría complacer todas sus necesidades.

Por otra parte, yo no soy perfecto. Soy un hombre con muchos defecctos, con una capacidad para fastidiar siempre las  cosas en un momento concreto. Ese tipo, que es sólo un pensamiento en tu mente, no puede cometer ningún error. En ocasiones, me puedo sentir frustrado y, a menudo, podría sentirme tan bajo que no sería capaz de dominar a una muñeca. Mientras, ese hombre podría controlar un establo de mocosas con sólo una mirada y la insinuación de una zurra.

Soy una persona impresionante y una buena persona por conocer, puedo ser extremadamente fuerte y dominante, amable, firme, y dominante leal a la sumisa que me lo da todo. Pero él, es todo eso, y mucho más. Quiero decir, ¿has llegado a leer alguna vez lo que él ha escrito? Quiero decir que, él es sumamente perfecto.

Pues bien, esa persona perfecta y perversa de la que hablo, es sólo un pensamiento, es lo que tú piensas, cuando lees mis escritos y usas palabras como un “verdadero Amo” o un “perverso increíble.”

Ya ves, nunca seré tan bueno como la personalidad de la persona que me proclama que es, nunca seré perfecto como esa idea que reside en tu mente. En su lugar, siempre estaré ahí, roto y dispuesto a compartir mis pensamientos con cualquiera que esté dispuesto a escucharlos.

Nunca voy a ser tan bueno como él, estoy de acuerdo con eso, porque, en su lugar, voy a seguir siendo real.

4 comentarios:

  1. No eres tan bueno como él porque eres él :). Ataecina

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  2. Lo que hace a un hombre perfecto es percibir sus imperfecciones y adorarlas lo mismo que sus múltiples virtudes.
    Lo que hace a un hombre perfecto es que te llene el pensamiento, sueños y deseos y entre esos deseos el desear saber más de él, porque sientes que en él habita la verdadera esencia, en el exterior la maestría de un Caballero seductor y en su interior esa bestia que pareciera indomable, pero él bien la libera y la deja ser, sin herir.
    Una persona impresionante, como bien ha expresado.

    Mi beso, se cuida

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  3. Esto podria ir dirigido a su publico en general...

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  4. En el bdsm la fantasía nunca llegará a ser tan buena como lo real.

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