miércoles, 20 de mayo de 2020

Pregunta de un dominante

Un dominante me ha enviado a un pregunta por medio de un email. Es un correo fascinante sobre los comienzos de una relación D/s. Creo que podría funcionar muy bien, dado que está muy interesado en recibir apoyo, ideas y consejos de los lectores. Añadiré algunos comentarios de mi propia cosecha al final, pero primero, su escrito…

Me enseñaron en la escuela de que no hay cosas como las preguntas de un alumno. En este caso, de un Dominante, pues aquí van.

Soy un hombre, recientemente, interesado en aprender más sobre este estilo de vida de la D/s. No me atrae nada el BDSM, pero me gusta azotar a mi esposa.

Ella está en una constante contradicción. Es muy auto suficiente, tiene su propio dinero y propiedades y sabe hacer muchas cosas que yo no sé hacer. Por otro lado, cada vez que tomamos decisiones sobre cualquier cosa, ella siempre dice: “Si esto es lo que quieres” o “lo que quieras.” Obviamente, tiene una fuerte tendencia a querer agradar.

Nunca me he aprovechado de esa tendencia y siempre he sido, a lo largo de mi vida y a través de nuestro breve matrimonio (sólo dos años), un tipo de hombre de complacer “en lo que sea.” Excepto, cuando la azoto.

De todos modos, últimamente he sintonizado con ella diciendo “lo que quieras” y ella lo dice mucho. Así pues, la semana pasada comencé a aprovecharme, por primera vez, de mis tendencias dominantes naturales. Hice dos cosas. Primera, le dije que quería que obedeciera cada una de mis órdenes en la cama durante media hora. Cuando ella me tocara sin mi permiso, la azotaría duramente. Le dije lo que tenía que hacer: “Hacerme una felación, etc.” A ella, le gustó. Después de aproximadamente media hora de órdenes ligeras, tuvimos un buen sexo. Esta mañana le dije que quería tener el control así otra vez y le pregunté si le gustaba. Ella me respondió: “Mientras te guste…”

Segunda, le dije la semana pasada que apagara el móvil cada vez que almorzáramos juntos. Antes de que nunca le dijera qué hacer, siempre la preguntaría si se encontraba bien. Esta vez, se lo acabo de decir. Anoche, cuando sonó su móvil durante nuestra cena, se disculpó. No la azoté ni nada por el estilo. Solamente le recordé de nuevo por qué era importante para nuestra relación apagar su teléfono, y ella estuvo de acuerdo.

Así pues, pasos de bebé. Pero puedo decir que ella tiene algunas de las características de una buena sumisa. Por ejemplo, pasará un tiempo (si sucede alguna vez) antes de que pueda convencerla de que entregue sus finanzas y su toma de decisiones.

De hecho, he planeado algunos pasos más. Cada mes intentaré agregar una nueva orden, por ejemplo, que me salude cuando llegue por la noche a casa. Afortunadamente, ella no trabaja. También tengo una lista de cosas que quiero que ella empiece a hacer sexualmente conmigo y que también iremos desarrollando poco a poco.  Por ejemplo, el sexo anal, que ella no disfruta y que me ha permitido hacerlo dos veces en dos años. Cosas como esa. Puedo trabajar una por mes, tengo el auto control suficiente para llevarlo a cabo.

Todavía no he discutido con ella, específicamente el tema del control. Si le dijera que quería controlarlo todo se reiría. Pero, por otro lado, a ella le gusta cuando me acerco al plato. Me hace sentir muy bien tener el control, es un sentimiento nuevo para mí, aunque siempre he sido muy asertivo en otros reinos. Así que tengo el liderazgo natural dentro de mí. Esto es sólo en mi casa, cuando vivía con mis padres, era mi madre quien llevaba los pantalones.

Me siento muy bien por haber dado estos pasitos de bebé. Tengo mucha curiosidad sobre lo que usted y sus lectores opinan sobre esta situación, por si voy en la dirección correcta. Cualquier consejo de sus lectores será bien recibido.
Un Dominante

5 comentarios:

  1. Por el momento, no lo discutas con ella. Simplemente, siga sus pasos con precisión y tenacidad. No pierda de vista las cosas que ya has conseguido de ella. Si te ha cedido un poco de control aquí y allá, mantén los que ya estás al frente. Si a ella le gusta que la lidere en el dormitorio, siempre es una buena señal.

    Es una sensación muy buena, ¿no?

    Sólo una reflexión o dos sobre los pasos a seguir (tú conoces mejor que yo vuestra situación):
    - Dile que no se meta en la cama antes que tú. Que se quede dispuesta mientras te preparas, y luego, invítela a que se acueste.
    - Podrías considerar un “uniforme” que ella debería vestir cuando te salude. Me gusta vestida con unas medias de punto hasta el muslo, una camiseta y bragas.

    Obviamente, es sexy, sin estar particularmente cachonda (y todavía más increíble con sus puños).

    Tu autocontrol es tu mejor herramienta. Sé firme en tu decisión y te sorprenderás.
    Un catalán

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  2. El comentario anterior lo enviaron directamente a mi mail.

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  3. ¡Tu mujer es muy afortunada!

    Disfrutad del tiempo que pasáis juntos y estoy de acuerdo en no “hablar” sobre esto con ella. Prefería ser yo quien estuviera en los zapatos de ella y que sucediera…

    Mis mejores deseos para ambos.
    María

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  4. Mi opinión:
    En primer lugar, quiero abordar lo que llamas una “contradicción,” es decir, su autosuficiencia, sus asuntos, en general, lo que parece sus excelentes capacidades. No existen ninguna contradicción en ser inteligente, capacitado, autosuficiente y ser sumisa. Las dos no son mutuamente exclusivas.

    Para ser justos, es un error muy común en muchas personas cuando conocen por primera vez este estilo de vida.

    Las sumisas no somos como, a menudo, nos retratan en Internet. Es decir, felpudos, incapaces de tener opiniones y cobardes.

    La realidad es que somos personas y las relaciones Sadomasoquistas o Dominante/sumisas son una DINÁMICA, lo cual infiere que hay aportes y reacciones por AMBAS partes.

    Creo que su enfoque es un buen comienzo, sin embargo, dudaría en fijar cualquier tipo de plazo cuantificable y arbitrario en los temas. Las relaciones están evolucionando constantemente, al igual que las personas sobre esos temas.

    Tú y tu esposa vais a tener que descubrir juntos lo que funciona para ambos. Debido a que una dinámica saludable, de larga duración y viable DEBE y DEBERÍA requerir la implicación de ambas partes.

    Por ejemplo, el sexo anal es un límite muy difícil para muchas personas. Sin embargo, manejado correctamente, creo que podría alentarla a disfrutarlo. Mi Dominante lo abordó de una manera muy inteligente y fue MUY paciente y, al final, fui yo quien lo buscó para llevarlo a cabo. Pero, de nuevo, establecer una fecha límite no sería aconsejable.

    Mucha suerte en vuestro viaje. Creo que con paciencia, honestidad y una sensibilidad poderosa, no solamente para vuestras propias necesidades, sino para las de ella, tienes una oportunidad muy buena para trabajar su dinámica en la dirección que te gustaría llevar.
    Sumisa del sur.

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  5. Dominante, creo que tu esposa es muy afortunada al tener a alguien en quien confía que despierta su personalidad y su sexualidad. Creo que tu esposa y yo (y muchas otras sumisas que he estado siguiendo por Internet) tenemos muchas cosas en común. Yo misma soy nueva en esto. Aunque soy muy consciente de mi posición, porque es a través de mi propio descubrimiento como he llegado a descubrir mi naturaleza ligeramente sumisa.

    Más importante aún, soy una mujer que ejerce el control en otras áreas de mi vida y disfruto inmensamente esa parte de mí. La otra cara de esa naturaleza es que puedo relacionarme fácilmente para permitir que alguien tome la iniciativa en mi vida privada, mi relación, y especialmente, en la cama.

    Mientras otros han dicho que situar las demandas fuera del dormitorio puede ser algo que funcione, les advertiría que no haga que las abarque todas. Siga con cuidado, sepa lo que es importante para su esposa fuera de la relación y no te metas en otras cosas. Hay cosas que guardo en mi vida con mucho cuidado, por ejemplo, mi libre albedrío (ooohhh, hoy me siento muy desafiante). Para emplear ejemplos ya proporcionados, como una sumisa novata, y no del todo cómoda con las perspectivas de vivir el estilo de vida las 24/7, me sentiría muy cómoda con usted diciéndole que apague mi teléfono durante el almuerzo o la cena, pero no me sentiría cómoda, si me dijera cuándo podría arrastrarme a la cama. Si ella es tan desafiante por naturaleza como yo, puede darse cuenta de que tú también ejerces tu control en otras áreas y haz movimientos para recuperar eso. Sé lo que yo haría.

    Dominante, ¿vas a seguir escribiendo por este medio? Me encantaría estar al día con tus nuevos avances.
    Sumisa novata

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